El “Bebe” Cooke fue un militante fundamental del peronismo que tuvo un destacado papel en los primeros años de la Resistencia iniciada por los sectores populares tras el golpe militar de 1955. En John William, práctica y pensamiento son una sola cosa y su experiencia militante será un espiral ascendente.
“La vigencia de su pensamiento radica en que su experiencia formativa fue forjada y sus conclusiones políticas más profundas fueron elaboradas en las cocinas de la lucha de clases de su época. Y no estaba allí por casualidad, fue llevado por sus fervores militantes, por su compromiso con las causas populares”, comenta sobre el “Bebe”, Guillermo Cieza en su prólogo al libro “El Hereje” de Miguel Mazzeo*.
Tempranamente con apenas 25 años fue diputado nacional en el primer gobierno de Perón, dirigió la revista “De Frente” desde donde discutió muchas de las políticas de la segunda presidencia y el golpe militar lo encontró como interventor del Partido Peronista de la Capital Federal. Será designado por el líder del movimiento, su delegado personal.
“El programa del ´45 ya estaba agotado en 1955 y por eso cayó el gobierno. Las soluciones son hoy cualitativamente diferentes porque son otras las estructuras que hay que sustituir. Entonces había desarrollo burgués, nacionalismo burgués, evolución capitalista dentro de planes generales y encuadrados en un sistema de justicia social. Ahora, es la clase obrera la que debe tomar la vanguardia en el combate”, decía Cooke en octubre de 1965 para la revista Extra**.
Pasará años en el exilio, primero en Chile, donde se casará con Alicia Eguren con quien compartirá su vida militante y luego irá a Uruguay. Participará de la primera experiencia guerrillera en nuestro país con Uturuncos y colaborará con la Huelga del frigorífico Lisandro de la Torre. En 1960, irá a Cuba y se encontrará defendiendo la revolución y, codo a codo con el pueblo cubano, peleará un año después en el combate de Playa Girón contra la invasión organizada por la CIA. El proceso de transformación de la Isla influirá, como a toda una generación, en su pensamiento.
“El único nacionalismo auténtico es el que busque liberarnos de la servidumbre real: ése es el nacionalismo de la clase obrera y demás sectores populares, y por eso la liberación de la Patria y la revolución social son una misma cosa”, comentaba el Bebe en una entrevista para la Revista Che en 1961***.
Tempranamente a sus 48 años, un día como hoy, murió producto del maldito cáncer. Como signo de la etapa por venir, al tiempo de de su muerte fue reprimido el foco guerrillero de Taco Ralo y casi un año después se producirá el Cordobazo. Nos queda su ejemplo militante de entrega y un pensamiento vigente para repensar el presente.
*”El Hereje. Apuntes sobre John William Cooke”, Miguel Mazzeo. Editorial El Colectivo, 2016. En este link se puede descargar el libro (aquí)
** “Cooke, de Perón al Che. Una biografía política”, Galasso. Ediciones Nuevos Tiempos, 2004.
*** Revista Che, de 1961, y Crisis, 1975, en elhistoriador.com.ar (aquí)