|Guión: Ailín Colombo y Paula Farbman
| Edición: Mauro Coseres
¿Negligencia u omisión? O lo que es peor: Intencionalidad.
En medio de sequías, acrecentadas por el cambio climático, múltiples chanchullos desencadenan focos de incendios en todo el país: desmontan para plantar soja, hacer negocios inmobiliarios y ensanchar la frontera agropecuaria, llevando puesta la vida de pueblos y territorios.
Hoy se registran focos activos en Córdoba, Santa Fé y Entre Rios. Las manifestaciones en Rosario y otras ciudades que fueron cubiertas por el humo, retomaron la demanda de emitir dictamen para que de una vez la Ley de Humedales pueda ser tratada y sancionada, pero que, oh, sorpresa: fue suspendida.
Dibujan progreso, pero es desmonte. La regulación en la producción no es prohibir ni ir en contra de la economía argentina: es preservar nuestros humedales, que permiten la vida animal, vegetal y humana. Si no es ahora ¿Cuándo?