| Por Agustina Machiavello
Hoy se buscará convertir en ley el proyecto de Etiquetado Frontal de Alimentos, en lo que sería la primera sesión presencial en el Congreso después de un año y medio de virtualidad por la pandemia. La iniciativa significa un avance en materia de derechos para contar con información clara y veraz sobre qué contienen los productos que compramos. Sin embargo, su aprobación aún peligra. El tratamiento de este proyecto fue obstaculizado, se habla de ‘lobby empresarial’ y de un boicot alentado por parte de la oposición en defensa de los intereses de las grandes empresas alimentarias, alegando que la ley afectaría la producción azucarera.
La sesión especial está convocada para las 11 de la mañana, y aunque se tocarán varios temas, el debate está centralizado en este proyecto en particular. El tratamiento se hizo esperar, teniendo en cuenta, además, que hay mucha intranquilidad porque el 30 de noviembre pierde estado parlamentario. En este marco, las últimas versiones que circularon con respecto al bloque de Juntos por el Cambio y su amenaza de no dar quórum vuelve a agitar las aguas haciendo que peligre la ley.
Desde Juntos por el Cambio tildan de “maniobra antirreglamentaria” a la sesión porque la notificación de Presidencia llegó fuera de horario y no fue consensuado el temario. Pero la ironía radica en que, días atrás, varies diputades del espacio participaron de un tuitazo pidiendo fecha para el tratamiento, sumado a que, en Senado, desde este bloque dieron la media sanción.
La polémica entre bloques mayoritarios terminó por confirmarse hoy temprano, cuando Juntos por el Cambio decidió que no se sentará en las bancas para sesionar, esto significa que el Frente de Todos tiene que buscar quórum con el resto de los bloques minoritarios porque se podría frustrar esta ley. Pero además en el temario del día de la fecha, están incluidas otras iniciativas como la Asistencia Integral para Personas en Situación de Calle y el Régimen Previsional diferencial para Trabajadores y Trabajadoras Vitivinícolas.
#LeyDeEtiquetadoYA
Bajo las consignas #LeydeEtiquetadoYa, #NoNosTapenLosjos y #AltoenLobby (simulando una etiqueta en clara referencia al lobby empresarial) se prevé una movilización frente al congreso y un acto para que, finalmente, el etiquetado frontal sea ley. La convocatoria es a las 10 hs y la llevan adelante distintas organizaciones sociales, ambientales y ONGS.
¿Cuáles son los puntos claves de la Ley de Etiquetado frontal de Alimentos?
Los puntos claves dentro de la ley son, por un lado, la incorporación de una etiqueta color negra con letras blancas en forma octogonal en los frentes de productos ultraprocesados para advertir sobre excesos de grasas trans, sodio y azúcares. Además, puesto las mitificaciones alrededor de los edulcorantes, se propone que los productos que los contengan deben tener una leyenda de precaución que diga ‘Contiene edulcorantes. No recomendable para ñiños/niñas´.
Por otro lado, obliga a las empresas a profundizar la información en relación a la composición de los azúcares. Deberían declarar cuantitativamente en el etiquetado nutricional hidratos de carbono simple como disacáridos y monosacáridos. Además, otro punto importante es que, según esta normativa, a los productos que tengan el sello de advertencia se les prohíbe la utilización de otros valores nutricionales, o la utilización de logos, personalidades públicas, o avales de comunidades científicas, etc. Este último punto es justamente para clarificar las características nocivas y desobstaculizar el acceso a la información en los consumos que pueden confundir con un enfoque marcando a las infancias.
La ley no solo promueve que transparente la dinámica del consumo per se, sino que apunta a concientizar y promover la prevención de la malnutrición y otras enfermedades crónicas. Se busca combatir desde la información uno de los tres factores de riesgo más asociados a la mortalidad, como lo es la obesidad que, junto a los otros dos -hipertensión e hiperglucemia en ayunas elevada- según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), causan 140 mil muertes al año.
Asimismo, no podemos dejar de mencionar que para generar un cambio paradigmático en nuestra alimentación, no sólo habría que desalentar el consumo de comestibles ultraprocesados, sino democratizar alimentos como frutas, verduras, cereales y legumbres que sean libres de agrotóxicos para que comer sano no resulte un privilegio. En este sentido, si bien esta ley aportaría mayor conciencia a la hora de consumir a nivel individual, resulta necesario pensar cómo se marcará el camino para garantizar que alimentarse saludablemente sea un derecho.
Foto de portada: Unicef