|Fotos: Julieta Piermaría
Estuvimos en la Escuela de Enseñanza Artística Rogelio Yrurtia y conversamos con les estudiantes que están llevando adelante la toma en reclamo por una educación pública de calidad.
“Los reclamos de la toma son las ACAP, las viandas, las reformas educativas, presupuesto educativo, las condiciones edilicias. En esas condiciones también estudiamos, con inundaciones constantes, grietas en todo el techo, están por caer las placas de durlock, con la mitad del edificio, en una obra frenada. Tenemos nomás el cemento, no está revocada la pared ni pintada y ya dieron por finalizada la obra. Esa es la realidad de la educación pública hoy en día”, explicó Lucía, estudiante del Yrurtia e integrante de la Coordinadora de Estudiantes de Base (CEB).
Uno de los principales reclamos que sostienen les pibes es el rechazo a las prácticas laborales enmarcadas en el proyecto que quiere llevar adelante el gobierno de la Ciudad, “Secundaria del Futuro”. Sobre esto, Lucía fue contundente, “Están haciendo que los pibes trabajen gratis”, y explicó, “en vez de educarles para el trabajo, en vez de darle verdaderamente una pasantía laboral paga, en condiciones, lo que hacen es mandarles a laburar gratis. Lo que quieren que aprendas es que vos vas a trabajar precarizado, que te van a pagar una mierda, que estás obligado a hacer todo eso. Que es una realidad que si bien es cierta en este país, no debería ser así”.
“Con hambre no se puede estudiar”, denuncian les estudiantes, y los fundamentos están a la vista. “El colegio está abierto desde las 7 hasta las 10 de la noche. En todo ese rato nosotres no tenemos comedor, no tenemos forma de alimentarnos. Las viandas consisten en un sanguche y una fruta que siempre está podrida, siempre está magullada y el sanguche es totalmente precario. No puede ser que les pibes acá se nos descompensan por el hambre”, cuenta la estudiante y sentencia “Así no se puede estudiar”.
Hacia el final, Lucía reflexionó sobre la actualidad del movimiento estudiantil y la importancia de la organización para defender los derechos del estudiantado:
“Verdaderamente todo esto logró conmover a los chicos y moverles algo adentro que ahora se está como convirtiendo en una especie de marea de chicos con ideas, con ganas de cambiar las cosas y que van a dar todo por una educación pública y de calidad“, concluyó Lucía.
Tomas para el futuro
Estudiantazo
La lucha de los secundarios por una educación pública de calidad
Producción |Por: Revista Resistencias