En la vorágine de las vísperas de las elecciones legislativas y a horas de la veda electoral, los principales candidatos y candidatas dan sus últimas entrevistas para dar a conocer sus propuestas. En este marco, conversamos con Johanna Luque, militante popular de las Organizaciones Libres del Pueblo (OLP), que integra la lista del Frente de Todos en la localidad de San Martín, provincia de Buenos Aires, como candidata a consejera escolar suplente, “Si se gana hay que ponerle todas las fichas a lo que la gente apostó, y si se pierde hay que ponerle el doble de fichas. No hay que decir “bueno, se perdió, que se arreglen los que vienen”. Hay que seguir luchando, hay que seguir haciéndose visibles y hay que seguir poniendo las necesidades del pueblo”.
La lista que integra la militante popular está encabezada por Nancy Capelloni, secretaria para la Integración Educativa, Cultural y Deportiva de San Martín, y por el diputado nacional por la provincia de Buenos Aires, Leonardo Grosso. Actualmente, el partido de San Martín se encuentra bajo el gobierno de Fernando Moreira, tras la licencia del intendente electo Gabriel Katopodis para ocupar el Ministerio de Obras Públicas desde el año 2020.
“Lo importante, más que la elección, es ir a votar. Tomar conciencia que es un derecho y una obligación como ciudadanos poder participar y decidir. El no participar nos deja afuera de todo contexto y de lo que refiere a las decisiones que después se van a tomar”, sostiene Johanna, y en cuanto a su participación, agregó, “es la primera vez que estoy participando en una elección, y veo que no sólo hay que mover los tantos ahora que estamos en campaña, sino que hay que hacerlo continuamente”.
Con una trayectoria y una militancia fuertemente vinculada a la economía popular, la candidata remarcó la necesidad de fortalecer los circuitos económicos impulsados por las y los trabajadores de las unidades productivas, “el que mueve la economía y el que sostiene todo esto somos nosotros, somos la gente de los barrios populares”. “Nosotros siempre vemos, acompañamos y participamos activamente de los procesos que hacen los compañeros en las unidades productivas, desde una mirada política, humana y comunitaria. Nadie resuelve su vida solo porque vivimos en comunidad”, explicó Johanna.
En este sentido, reivindicó la consigna principal de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), de la que forma parte, y dijo, “En San Martín, la salida es con trabajo, que nuestro propósito es tener tierra, techo y trabajo. El trabajo para poder trabajar la tierra y el techo para poder vivir de una forma digna”.
Con un gran conocimiento de la realidad y las demandas de los barrios populares y su gente, y desde su rol de militante social y ahora candidata, mantiene el reclamo de un compromiso con les más postergades que no se limite al período electoral, “necesitamos la compañía de los que están más arriba, de los que nos dirigen, de los que pueden llegar a tener la voz para tomar una decisión, y hacernos escuchar”. “Son infinitas las necesidades, pero ahora en elecciones no me agrada eso que sólo se visualice ahora, en uno o dos meses, y que después quede todo calmo y vemos cómo seguimos. No, no vemos cómo seguimos nada, hay que hacerlo igual, se gane o se pierda hay que seguir haciendo”, concluyó.
¿Por qué crees que es importante esta elección?
Lo importante, más que la elección, es ir a votar. Tomar conciencia que es un derecho y una obligación como ciudadanos poder participar y decidir. El no participar nos deja afuera de todo contexto y en lo que refiere a las decisiones que después se van a tomar. Eso es lo importante para mi, tomar conciencia para ir a decidir
¿Qué te parece que es importante en San Martín para que se ocupen desde la municipalidad o desde el Consejo escolar?
Problemáticas hay en todos lados y creo que en casi todos son las mismas. Para empezar es el trabajo, el trabajo genuino, el trabajo que se genera a través de la economía popular, la producción de los compañeros que estamos trabajando en las organizaciones sociales tenerla en cuenta, la participación en el ámbito laboral de estos compañeros que cobran un programa social. Más allá de algún empleador, de alguna empresa privada, el que mueve la economía y el que sostiene todo esto somos nosotros, somos la gente de los barrios populares. Yo creo que en eso debería enfocarse más. Obviamente la educación es un problema de todos los tiempos. Siempre hay que ir retocando y poniendo más énfasis en eso.
En San Martín, la salida es con trabajo, que nuestro propósito es tener tierra, techo y trabajo. El trabajo para poder trabajar la tierra y el techo para poder vivir de una forma digna.
Vos sos una militante social, ligada a los movimientos populares, ¿cómo es el trabajo que haces en torno a eso?
Nosotros siempre vemos, acompañamos y participamos activamente de los procesos que hacen los compañeros en las unidades productivas, desde una mirada política, humana y comunitaria. Nadie resuelve su vida solo porque vivimos en comunidad y así está hecha nuestra sociedad. Y como militante de una organización social, particularmente de mi persona, me involucro mucho en lo que es la economía popular. Nosotros nos interesamos demasiado en que, a través de las políticas, el desarrollo que se lleva a cabo para que los compañeros puedan llevar un plato a su mesa no sea solamente por la solidaridad de las compañeras que hacen la olla popular, sino que ellos mismos generen su trabajo y vayan armando redes de unidades productivas, de unas con otras, y vayan resolviendo su vida económica gestionando, produciendo y vendiendo sus propios productos. O sea, activando la economía desde las mismas unidades, panaderías, talleres, textiles, infinidad de cosas. Por necesidades uno aprende a hacer un montón de cosas.
Y para cerrar, ¿cómo ves la situación general de San Martín desde tu perspectiva de militante y ahora como candidata también?
No estamos bien, el país no está bien. Hay decisiones que están erradas y todos lo sabemos. Hay prioridades que no se deben dejar de lado, que se tienen que visualizar ya, ahora en lo inmediato, no dejarlo para después.
Yo es la primera vez que estoy participando en una elección, y veo que no sólo hay que mover los tantos ahora que estamos en campaña, sino que hay que hacerlo continuamente. Todos los días y fuera del tiempo de campaña también. Si se gana hay que ponerle todas las fichas a lo que la gente apostó y si se pierde hay que ponerle el doble de fichas. No hay que decir “bueno, se perdió, que se arreglen los que vienen”. Hay que seguir luchando, hay que seguir haciéndose visibles y hay que seguir poniendo las necesidades del pueblo.
La gente de los barrios populares, los que vivimos en las villas y asentamientos tenemos necesidades desde siempre y siempre las vamos a tener, pero necesitamos la compañía de los que están más arriba, de los que nos dirigen, de los que pueden llegar a tener la voz para tomar una decisión, y hacernos escuchar. Que nos escuchen ellos y ayudarnos a que nos escuchen los demás sobre las necesidades de siempre, tanto alimentarias, de territorio, de techo, de educación, de inseguridad, de educación. Son infinitas las necesidades, pero ahora en elecciones no me agrada eso que sólo se visualice ahora, en uno o dos meses, y que después quede todo calmo y vemos cómo seguimos. No, no vemos cómo seguimos nada, hay que hacerlo igual, se gane o se pierda hay que seguir haciendo.