|Cobertura Fotográfica por Antonella Giuso
A días de cumplirse 3 años del homicidio de Cristopher “Bocha” Rego, el Tribunal Oral en lo Criminal N°3 dictó la sentencia a los imputados. El principal culpable, el prefecto Pablo Brítes, fue condenado a cadena perpetua por los cargos de autor penalmente responsable del delito de homicidio doblemente agravado por su condición, con un arma de fuego y por haber sido cometido con abuso de su función como miembro de las fuerzas armadas.
Al finalizar el juicio, Jorge Rego, padre del Bocha, expresó al Colectivo de Medios Populares, “Espero que, a partir de ahora, sea un punto de inflexión para que en el resto de los casos de gatillo fácil actúen así y haya perpetua para todos los asesinos de nuestros chicos. Espero que haya más fallos contundentes como el de hoy para mis compañeros y compañeras”.
En cuanto al resto, los agentes Cristian López, Lucila Carrizo, Javier Fernández y Rubén Viana fueron condenados a 4 años de prisión, con 8 de inhabilitación, por encubrimiento doblemente agravado por la especial gravedad del delito precedente y por el carácter de funcionario público; mientras que Axel Gregorio Díaz Guevara y Mariano Paredes fueron absueltos.
Desde el día del asesinato del Bocha, la familia Rego estuvo acompañada por integrantes de la Marcha Nacional Contra el Gatillo Fácil, quienes se hicieron presentes ayer. “Que ahora hayan condenado a Brites a perpetua, para nosotros es ese poquito de justicia para todos los pibes. Porque cuando nosotros decimos que luchamos por todos es así verdaderamente. Y no sólo luchamos por la sentencia, sino por la conciencia”, señaló Emilia Vasallo, madre de Paly Alcorta e integrante de la Marcha Nacional, y arengó: “Todos los pibes y las pibas asesinadas, ¡presentes! ¡Ahora y siempre!”.
El asesinato del Bocha ocurrió el 12 de agosto del 2018, en el barrio de Parque Patricios, cuando el joven intentó esquivar un control de tránsito y el entonces prefecto Pablo Brites disparó contra la camioneta en la que iba. Una de las balas impactó en su espalda y le ocasionó la muerte algunas horas más tarde en el hospital Penna.