|Por Ailín Colombo
Se cumple el primer aniversario del asesinato de Lilian Mariana y María Carmen Villalba, las niñas argentinas de 11 años, víctimas de las Fuerzas de Tareas conjuntas de Paraguay. El hecho fue catalogado por el presidente del país vecino, Mario Abdo Benítez, como un “operativo exitoso” contra la organización guerrillera Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). Las niñas habían viajado desde Argentina, para visitar a sus padres, militantes de la organización guerrillera.
Ayer, la Gremial de Abogadxs, que representa a las familias de las niñas, asistió a una reunión con funcionarios de la Cancillería Argentina, en la que remarcaron que los mandatarios explicaron “los permanentes obstáculos y negativas del gobierno de Paraguay a dar información o permitir el ingreso del Equipo Argentino de Antropología Forense para que realice una autopsia independiente.”
Semanas después del doble infanticidio, la familia denunció la desaparición forzada de Carmen “Lichita” Oviedo Villalba, de entonces 14 años, hija de Carmen Villalba, referente de EPP y presa política hace casi 19 años. Desde noviembre del año pasado no se tienen noticias de la adolescente. Cabe destacar que Néstor, hermano de Lichita de 13 años, fue asesinado durante otro operativo del ejército hace algunos años.
Según la Gremial de Abogadxs, Lilian y María Carmen fueron secuestradas, torturadas y asesinadas. Las primeras informaciones difundidas por el gobierno paraguayo sostuvieron que se trataba de adolescentes de entre 15 y 17 años miembros de la guerrilla que fueron abatidos. Los familiares de las niñas y las organizaciones de derechos humanos se encargaron de desmentir estas versiones y denunciar que se trató de una ejecución
Portada: Pulso Noticias