El Jefe del Comando Sur llegó a nuestro país. Se trata del Almirante Craig S. Faller que con la excusa habitual de entregar donaciones para ayuda humanitaria se reunió con la Ministra de Salud, Carla Vizzotti y el Ministro de Defensa, Agustín Rossi.
El Comando Sur es la expresión del Pentágono para la región y Faller es un viejo militar que combatió en Afganistán. La ayuda humanitaria es un astuto método de la política imperialista de Estados Unidos para usarlo de puente para la injerencia en asuntos internos de los países. En esta oportunidad, Faller trajo consigo tres hospitales móviles e insumos médicos por 3,5 millones de dólares.
En medio de las negociaciones con el FMI, tras el retiro de nuestro país del Grupo Lima (alineado por la política de EEUU para la región), sumado a una política no injerencista sobre Venezuela y la creciente influencia de China, la visita adquiere un carácter geopolítico de trascendencia ante la nueva administración demócrata de Biden.
Según ha trascendido, entre los principales temas conversados entre Faller y Rossi, estuvo el veto de Inglaterra a la compra de armas que tengan alguna fase de producción en su país por parte de la Argentina, algo que estaría frenando el programa de equipamiento militar que está desarrollando el ministerio de Defensa y en el que los EEUU es de los principales proveedores del mismo. También se habló sobre el aprovisionamiento de vacunas para nuestro país.
Para los pueblos latinoamericanos la presencia de un jefe militar de los Estados Unidos, con los antecedentes del Plan Cóndor y tantas atrocidades que ha producido y continúa cometiendo esa nación sobre nuestros pueblos y los del mundo, genera preocupación y rechazo. Por ello, el Farrell y toda la delegación del Comando Sur, “no son bienvenidos”.
Imagen de portada: argentina.gob.ar