Desde el primero de febrero realizan una protesta contra la violación de los derechos humanos en las cárceles argentinas. Resistencias conversó con el militante antirrepresivo Alfredo Cuellar.

Familiares de detenidos y detenidas en las distintas cárceles del país realizan, desde el primero de febrero, un acampe frente al edificio de la Corte Suprema de Justicia del microcentro porteño en protesta a las condiciones infrahumanas en las que se encuentran los privados de su libertad. El hacinamiento a causa de la sobrepoblación, la degradación de las condiciones de salubridad y el accionar represivo del Servicio Penitenciario envuelven una serie de violaciones a los derechos humanos a las que las instituciones estatales siguen sin dar solución. Respecto a la demanda, Revista Resistencias dialogó con Alfredo Cuellar, referente de las familias, militante antirrepresivo y padre de “la China” Cuellar, asesinada por el Servicio Penitenciario en el año 2012.

Alfredo aseguró que el reclamo lo llevan adelante las familias para evitar la muerte de más pibes y pibas, “no queremos que nuestros hijos emprendan una lucha dentro de las cárceles porque cada agitación que se genera dentro termina con alguna persona sin vida, asesinada por el servicio penitenciario”. Y explicó: “Venimos realizando el acampe porque es el último recurso que tenemos para seguir exigiendo que se cumplan todos los derechos en tiempo y forma. Hemos recorrido diferentes sectores, departamentos judiciales, hemos iniciado marchas, escraches… Todo lo que tuvimos que hacer y nunca obtuvimos respuestas. La última instancia es venir al poder judicial para pararnos frente a la Corte Suprema y así, de alguna manera, nuestras voces sean escuchadas en nombre de todos los presos de todas las provincias a nivel nacional”.

El miércoles 17 el acampe estuvo envuelto por la convocatoria del Ni Una Menos, que concentró frente a los Tribunales de la calle Talcahuano para exigir justicia por el femicidio de Úrsula, la joven que había denunciado en varias oportunidades a su agresor, integrante de la policía bonaerense. Un caso que expone nuevamente el accionar vicioso de la justicia. Desde allí, Alfredo señaló que una de las consignas que también levantan las familias es la de “Ni una menos en las cárceles” y enumeró las diferentes situaciones de violencia a las que son expuestas las mujeres privadas de su libertad. “No podemos seguir permitiendo que haya gente que aún siga privada de su libertad aunque haya cumplido su condena. No podemos permitir que haya niños encerrados entre cuatro paredes. No podemos permitir que las mujeres embarazadas sigan perdiendo a sus bebés dentro de las unidades penitenciarias. No queremos que haya más muertes en las cárceles, por eso una de nuestras consignas es “ni una menos en las cárceles”.

“Desde afuera decidimos acampar por tiempo indefinido hasta que tengamos las respuestas de lo que necesitamos saber: ¿Por qué el poder judicial a través de la Corte Suprema de la Nación no exige que se cumplan las leyes que ellos mismos impusieron a través de la Constitución Nacional? La Constitución, en el artículo 18, dice que todas las cárceles tienen que ser sanas y limpias, pero sin embargo, nosotros, entendemos que es simplemente una teoría. Por eso hoy tenemos las problemáticas que tenemos dentro de las cárceles, que como dijimos anteriormente, están superpobladas, con un hacinamiento tremendo. Hay una plaza para 24 mil personas y hay 48 mil. Todo esto se debe a la negligencia y a la inoperancia del poder judicial avalado por el Estado, que tiene una complicidad tremenda para seguir haciéndonos creer a nosotros que en plena democracia ya dejó de existir el aparato represivo. El aparato represivo sigue aplicando todas sus fuerzas sobre aquellas personas vulneradas dentro de las cárceles. Por eso, también es muy importante estar acompañando el acampe y que sean visibles nuestros casos”, apuntó.

Una de las actividades que convocan para visibilizar el reclamo es un ciclo de cine en el acampe (Talcahuano 550, Ciudad de Buenos Aires) en el que se proyectará las películas Pabellón 4”, del director Diego Gachassin, quién dará una charla, además de “Rejas, suspiros y llaves” mañana y el sábado desde las 19.

“Llevamos desde el primero de febrero con este acampe indefinido para que seamos recibidos o tengamos respuestas. Nos han recibido el petitorio pero aún no tenemos respuestas, entonces vamos a permanecer hasta que tengamos las respuestas que consideremos efectivas para todas las personas privadas de su libertad”, finalizó Cuellar.