Justicia patriarcal
Un nuevo intento de femicidio tiene como víctima a Laura Herrera, de 25 años. Acusada de “Homicidio agravado por el vínculo” se encuentra detenida en la Comisaría 5ta de Villa Fiorito, tras defenderse de ser estrangulada por su ex pareja, Sergio Pavón, al cual había denunciado previamente por violencia de género y por la que contaba con una perimetral.
El hecho ocurrió el pasado 21 de julio, cuando éste se dirigió sin avisar a la casa de Laura con la supuesta intención de cenar. Al terminar de comer comenzó una fuerte discusión, Pavón la golpeó y hasta causó un incendio al abalanzar un colchón contra una estufa. Por la pérdida de los objetos ella fue hasta el domicilio de él, a unas pocas cuadras, exigiendo que se responsabilice del daño, pero la situación empeoró. Mientras discutían en la cocina él comenzó a ahorcarla, Laura tomó un cuchillo y se defendió, le hizo un corte en la pierna que terminó causándole la muerte.
“Mantenerla detenida es una muestra de la selectividad machista y clasista de la justicia. Laura defendió su vida y evitó ser una estadística más dentro de los femicidios que suceden a diario en nuestro país”
Según datos del Observatorio Ahora Que Sí Nos Ven, de 162 femicidios ocurridos hasta el 1ro de julio, 33 víctimas habían realizado denuncias previas y 11 tenían medidas de protección. Estas cifras y el caso mencionado son consecuencia del desamparo por parte de la justicia y la falta de una respuesta integral por parte del Estado.
La abogada, Raquel Hermida Leyenda, busca que la joven sea juzgada en el marco de una situación de violencia de género que cuenta con antecedentes y afirmó que mientras hay “abusadores y homicidas que están en su casas” a la espera de un juicio, sería una clara muestra de “machismo judicial” no darle la misma oportunidad a Laura. A su vez, la Red de Autocuidado Feminista expresó en un comunicado su repudio a la causa y aseguran que “Mantenerla detenida es una muestra de la selectividad machista y clasista de la justicia. Laura defendió su vida y evitó ser una estadística más dentro de los femicidios que suceden a diario en nuestro país”.
Laura Herrera vive en Villa Centenario con su hijo, de 6 años. Trabajaba como niñera hasta que quedó desempleada al comienzo de la cuarentena, por lo que su sustento económico pasó a ser la pensión por discapacidad del niño que padece hipoacusia, epilepsia y trastornos generalizados del desarrollo, más la cuota alimentaria que recibía de Pavón. Fue detenida en una situación totalmente arbitraria, no sólo por defenderse de un intento de femicidio sino por haber sido obligada a declarar sin abogada luego de que ella misma haya dado aviso del hecho al SAME y la policía. Con el acompañamiento de organizaciones feminista y la defensa de su abogada espera pronto estar en libertad.