De lxs 30.400 a lxs personas LGTB votando a la ultraderecha. A partir de un texto de Larry Mitchell

Por Arcoiris Peronista ( @arcoiris.peronista )

Diseño: Emiliano Guerresi

“Ha pasado mucho tiempo desde las últimas revoluciones, y los maricas y sus amigas todavía no son libres”. Larry Mitchell (1)

Las personas LGTB+ y las feminidades perdimos doblemente en las últimas elecciones presidenciales. La paliza fue peor, ya que se dio a 40 años de la recuperación de la democracia. ¿Cómo pasamos de militar lxs 30.400 a que compañerxs de nuestro propio colectivo se quejaran del carácter político de nuestra Marcha del Orgullo? ¿En qué momento creímos que nuestros derechos estaban garantizados para siempre? ¿Qué pasó con la memoria de la diversidad? ¿Qué verdad estamos escuchando? ¿Hasta dónde buscamos justicia?

“Las maricas aprendieron que al servicio de los hombres podían crear sus obras maestras, educar a sus hijos, preparar su comida, atender sus jardines, diseñar sus casas, trabajar en sus fábricas y masajear sus espaldas sin mayor preocupación por el resultado. Aprendieron a sobrevivir como personas oprimidas”. Larry Mitchell (2)

Poco tiempo gozamos plenamente de nuestros derechos: la campaña de Javier Milei fue la primera, luego de las conquistas civiles en las presidencias de Néstor y Cristina, sumadas a otras durante la de Alberto Fernández; que cuestionó y estigmatizó a las diversidades. Nos compararon con rengos, con tener piojos; se dijo que nuestros derechos estaban garantizados con la unión civil y prometieron eliminar (y así lo hicieron) el Ministerio de Mujeres Géneros y Diversidad. ¿Fue la falta de costumbre a una libertad que antes no teníamos? ¿Tanto nos habíamos acostumbrado a la clandestinidad e ilegalidad que votamos a quienes prefieren seguir manteniéndonos ahí? ¿Caímos acaso en una especie de Síndrome de Estocolmo social de modo que preferimos enamorarnos de los captores que de quienes nos quieren libres? Vivimos como personas oprimidas, y sin duda seguimos siéndolo, pero la diferencia es que esta vez votamos a quienes abiertamente nos oprimen.

¿Por qué hablo hasta ahora como si todo el colectivo hubiese votado igual? No es una generalización arbitraria, sino una responsabilidad compartida. La memoria de Carlos Jáuregui, Lohana Berkins, Diana Sacayán, César Cigliutti es algo que no hemos sabido transmitir a las nuevas generaciones. Hay quienes venimos levantando la voz desde hace tiempo, ansiando que nuestra marcha recuperara el carácter confrontativo que tenía en su origen. No pudimos, había demasiadas maricas ocupadas en maquillarse como para escuchar nuestras advertencias. Pero también fue responsabilidad nuestra. Hemos creado tantos sub ghettos y hay quienes se han puesto tan mezquinxs por poder que rompimos toda hermandad.

“Las maricas, está comprobado, creen demasiado pronto que ha llegado la revolución e igualmente lo celebran demasiado pronto. La vanguardia exige que la revolución siga hasta el infinito y, por tanto, exige que solo se planifique la celebración, pero que no se celebre.” Larry Mitchell (3)

En fútbol, creo haber escuchado que hay una cábala de no festejar antes de que no termine el partido y esté ganado. Siempre dijimos que las expresiones del Orgullo eran revolucionariamente alegres, en contraposición a la violencia que sistemáticamente recibimos. Hoy quiero permitirme la duda, ¿no estaremos festejando antes de tiempo? Días antes de las elecciones en Argentina nos enteramos del travesticidio de Zoe López en nuestro país. Pero vimos también en México la muerte del primer magistrade no binarie, Ociel Baena, y en España el primer intento de retroceso en derechos LGTB+ de la democracia española.

Tiempos de resistencias comenzaron desde el 10 de diciembre, el mundo nos mira y será nuestro ejemplo que nadie agache la mirada. Hemos aprendido que nuestras vidas valen, que no necesitamos ni debemos escondernos. Comprendimos que conceptos esenciales como “familia” y “amor” también aplicaban a nosotrxs.

¡Nessun dorma maricas! Nuestra vigilia comenzó y no vamos a descansar hasta que no quede en pie un solo ladrillo que edifique una patria libre, justa, soberana y diversa.


Citas:

(1) Mitchell, Larry. Maricas y sus amigas entre revoluciones.Ediciones Consonni.Buenos Aires 2021, pág. 30. 

(2) Mitchell, Larry. Maricas y sus amigas entre revoluciones.Ediciones Consonni.Buenos Aires 202, pág. 36

(3)  Mitchell, Larry. Maricas y sus amigas entre revoluciones.Ediciones Consonni.Buenos Aires 2021 pág. 52