|Por Antonella Giuso, Ailín Colombo y David Pike

El sindicato de las y los trabajadores de la economía popular presentó sus autoridades provisorias en un proceso de formalización para avanzar en su pleno reconocimiento legal por parte del Estado. Continuando con el otorgamiento de la personería social, la UTEP celebró este jueves 29 la formalización de sus representantes con un acto en su sede del barrio de Constitución.

Esteban “Gringo” Castro continuará siendo el secretario general del sindicato. El referente del Movimiento Evita planteó, “tengo enorme confianza en el heroísmo y en la capacidad de construcción colectiva de nuestro pueblo, por eso lo que uno siente es una enorme contención para la pelea que hay que dar”.

La unidad construida en un diverso abanico de movimientos populares que integran la UTEP es el mayor mérito de este sindicato. Las negociaciones al interior del mismo no fueron sencillas, conciliar las distintas expresiones en el reparto de autoridades siempre es la tarea más difícil de la política y el motivo principal de las rupturas. Sanamente, primaron las necesidades complementarias que tienen cada una de las distintas expresiones.  

Dina Sánchez del Frente Popular Dario Santillán y el Frente Patria Grande fue nombrada como secretaria general adjunta. En su discurso hizo un recorrido histórico sobre el sujeto a representar, “representamos a las organizaciones sociales que nacieron del calor de la resistencia neoliberal de los 90’, volvimos a renacer después de la crisis del 2001, maduramos en el 2003 y en el 2015 pudimos construir una unidad en la acción; en el 2019 pudimos conformar la UTEP”.


Por su parte, Norma Morales de Barrios de Pie-Somos, también nueva secretaria general adjunta, enfatizó en la cuestiones de género, “a nosotras nos costó empezar a deconstruir ese patriarcado, porque a nosotras mismas nos hicieron creer que servíamos solo para cambiar pañales y hemos demostrado que tenemos mucha capacidad, hoy estamos al frente”. La UTEP definió en su estatuto la paridad de género, repartiendo en partes iguales los cargos entre compañeras y compañeros.

Gildo Onorato, referente del Movimiento Evita y nuevo secretario general adjunto para gremiales, hizo hincapié en la novedad histórica que implica esta herramienta gremial, “estamos construyendo un sindicato de nuevo tipo, ya que la economía popular ha cambiado la relación social que mueve el mundo. Antes era el patrón y el asalariado, ahora es el trabajador que se inventa su propio trabajo, se organiza, se asocia y sueña con tener dignidad”.

La batalla cultural


En la constitución de este sindicato se formaron las características secretarías que organizan las distintas actividades de los gremios. Entre ellas, la Secretaría de Cultura que será conducida por Belén Rozas de las Organizaciones Libres del Pueblo (OLP). “Los desafíos son muchos, nuestra tarea más urgente es trabajar sobre lo que mencionó nuestro secretario general durante la presentación, la batalla de ideas”, sostuvo la militante.

La herramienta de la Secretaría nos permitirá hacer un diagnóstico federal cultural necesario para elaborar un plan que realmente dispute sentido común con los sectores que históricamente han comunicado que nosotres, entre otras cosas, no trabajamos”, planteó Belén.

La militante de zona sur del conurbano bonaerense se refirió al nuevo sindicato, “lo veo en dos sentidos, por un lado es la síntesis gremial de un proceso histórico protagonizado por los movimientos populares. En mi caso, por una cuestión de edad, esa es una lucha heredada, pero muchísimos compañeres que hoy forman parte de la UTEP empezaron su camino en el movimiento piquetero. Por otro lado, creo que es una apuesta estratégica muy importante, basada en la comprensión de que la columna vertebral de la clase trabajadora no es la misma que en otros momentos de nuestra historia, representamos al 30% de la parte económicamente activa del país”.

Hay 4 millones de personas en Argentina que se encuentran dentro de la economía popular, necesitan representación y respuestas urgentes”, concluye la nueva secretaria de cultura. “La creación del sindicato es entonces, ante todo, la decisión política de construir un país que no duerma tranquilo sabiendo que hay hambre y que aún falta tierra, techo y trabajo”.

Tareas y desafíos

Este viernes 30 las nuevas autoridades provisorias serán presentadas en el Ministerio de Trabajo mientras continúa avanzando la plena formalización y la militancia continúa el proceso de afiliación.


La tarea que le depara a la UTEP, no es sencilla, se ha constituido como el sindicato cuantitativamente más importante del país y a la vez es el sector de la clase trabajadora con menos derechos. Por primera vez un gobierno nacional ha reconocido al sector, sin embargo, en palabras del secretario de la economía social del Ministerio de Desarrollo Social, Emilio Pérsico, “nos escuchan, pero no nos ven”. Será, entonces, tarea de las nuevas autoridades hacerse ver.

Paralelamente, este sujeto social en su lucha por la plena adquisición de derechos deberá, complementariamente, disputar la percepción peyorativa que una amplia parte de la sociedad tiene sobre ellas y ellos. El secretario general de la UTEP lo planteó en términos de batalla cultural, “hay una profunda estigmatización y subestimación sobre el sector al que representamos, vía medios de comunicación. Esa es una batalla cultural que estamos dando, pero necesita profundidad, que se logra con un sindicato que piense en la reivindicación inmediata y que tenga mirada estratégica pensando en un proyecto de país”.


Fotografía por Antonella Giuso