|Por Emiliano Guerresi
La cooperativa Oro del Inca produce fideos nutricionalmente fortalecidos y los distribuye en 15 comedores comunitarios de Quilmes y alrededores. Ante la demanda de alimentos en los comedores populares, "surgió la iniciativa de poder elaborar un producto nutricionalmente más completo, que brinde mayor cantidad de nutrientes que el fideo tradicional y sea elaborado por el trabajo popular, solidario y cooperativo", nos cuenta Eliana Bazar de Oro del Inca en esta entrevista para Revista Resistencias.
Oro del Inca es una cooperativa de alimentos radicada en Quilmes, zona sur del conurbano bonaerense. Desde que se conformó proponen que la economía popular -del pueblo- puede y debe desarrollar formas de producción eficientes cuyo objetivo sea la reproducción ampliada de la vida de todxs y no el lucro de unos pocos. Entienden que las formas de retribución deben ser justas, basadas en el trabajo y no en títulos de propiedad, reconociendo los diferentes esfuerzos y necesidades.
Hacia fines del 2019 se hicieron cargo de la continuidad de Pasta Sur, una cooperativa productora de fideos con muchos años de historia en la zona. El primer objetivo fue mantener la calidad, pero renovando los procesos de producción (que le permitan producir a mayor escala) y mejorando la comunicación para llegar a un mayor público. Además pudieron incorporar más compañerxs, generando nuevos puestos de trabajo.
Hoy en día, gracias a una articulación con el MNER (Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas), la Dirección de Vinculación Tecnológica de la Facultad de Cs. Exactas de la Universidad de La Plata (UNLP) y el CIDCA (Centro de Investigación y Desarrollo en Criotecnología de Alimentos) buscarán elevar de forma significativa la calidad nutricional de los fideos.
Conversamos con Eliana Bazar, licenciada en nutrición que forma parte de Oro del Inca, quien nos aportó más detalles:
¿Cómo surge el proyecto de comenzar a producir fideos nutricionalmente fortalecidos?
--Con el comienzo de la pandemia y el aislamiento surgió una iniciativa que reúne artistas y productores llamada “Sumá fideos a la olla”, a través de la cual con la compra de un producto artístico la cooperativa elabora fideos que luego son entregados en distintos comedores comunitarios de la zona de Quilmes y alrededores. Hasta el momento, a través de la campaña pudimos articular con 15 comedores y elaborar 1.500 kg que fideos, que representan 15.000 platos de comida.
En este contexto donde la pandemia profundizó la desigualdad existente, aumentando los niveles de exclusión económica y social, y considerando la necesidad y la demanda creciente de este tipo de alimentos por los sectores populares, surgió la iniciativa de poder elaborar un producto nutricionalmente más completo, que brinde mayor cantidad de nutrientes que el fideo tradicional y sea elaborado por el trabajo popular, solidario y cooperativo.
A través del MNER llega la vinculación con la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad de La Plata, con quienes iniciamos el trabajo.
¿A quiénes está dirigida su producción?
--La producción está inicialmente dirigida a estos sectores con los que ya venimos trabajando - principalmente comedores comunitarios- que hoy son el receptor de una cantidad cada vez más creciente de familias que se acercan a estos espacios frente a la crisis alimentaria y económica actual.
La idea a futuro es poder ampliar el alcance tanto dentro como fuera del municipio.
¿Con quiénes están articulando este proyecto?
--El proyecto vincula a la Cooperativa con la Universidad de La Plata y el CONICET, quienes designaron como unidad ejecutora al Centro de Investigación y Desarrollo en Criotecnología de Alimentos (CIDCA).
La idea es formar un equipo técnico que vincule ambas partes, en el cual el CIDCA aportará mayormente con los conocimientos técnicos para el desarrollo del producto, que luego será replicado y elaborado por la Cooperativa a mayor escala.
¿Qué diferencias hay entre el tipo de fideo que se va a producir y un fideo común en cuanto a sus valores nutricionales?
--Los fideos tradicionales son elaborados a base de harina de trigo refinada que, si bien por ley está enriquecida con algunos nutrientes, aporta básicamente hidratos de carbono, con bajo aporte de fibra, proteínas y hierro. La propuesta es generar un producto que combine la harina de trigo con harinas de legumbres para mejorar así el perfil de los nutrientes mencionados, habitualmente escasos en la alimentación actual.
Esto nos parece un punto clave, ya que al tratarse de un alimento ampliamente utilizado, consideramos que puede ser un excelente vehículo para otros nutrientes tan esenciales en la alimentación.
¿Qué perspectivas a futuro surgen a partir de la concreción de este proyecto?
--La perspectiva a futuro es poder ampliar el alcance del producto a otros espacios. Actualmente nos encontramos trabajando en articulación con el Municipio de Quilmes y Provincia de Bs As para planificar el trabajo a mayor escala dentro de la fábrica. Creemos que estas experiencias son un paso hacia la soberanía alimentaria, la producción local y cooperativa.