Ayer, el pueblo chubutense salió una vez más a las calles en defensa del agua y del suelo de su provincia. La iniciativa surgió tras la decisión del gobernador Mariano Arcioni de imponer la zonificación que permita la explotación megaminera actualmente prohibida por la ley 5001. Esta ley impide la actividad minera metalífera en la modalidad de cielo abierto y la utilización de cianuro en los procesos de producción de minera.

La lucha de los y la chubutenses contra la megaminería y el extractivismo es histórica. Allá por el 2003 fueron pionerxs en el tema con el plebiscito de No a la Mina en Esquel, gracias al cual se sancionó la ley 5001, y años más tarde mantuvieron la resistencia frente a los diversos intentos del gobierno provincial de modificar la ley, en beneficio propio y respondiendo a intereses que atentan contra la vida y la salud del pueblo.

Es tiempo que el gobernador se digne a escuchar la voz de un pueblo que tiene en claro que la vida y el agua no se negocian.

Foto: @NoaLaMinaEsquel

Foto portada: Red43