Por Ailín Colombo

Las y los trabajadores de los subtes porteños realizaron durante el transcurso del día un paro rotativo en todas las líneas de la ciudad. Exigen que la empresa concesionaria Metrovías-Emova "devuelva la totalidad de los salarios ilegalmente descontados" a los trabajadores que se adhirieron a medidas de fuerza, informaron mediante un comunicado. El trasfondo del reclamo es la lucha contra el asbesto en la red.

Foto Prensa AGTSyP

El asbesto es un mineral cancerígeno que durante el siglo pasado se utilizaba como material de construcción, principalmente como aislante. Cuando se descubrieron sus efectos nocivos para la salud fue prohibido en más de 50 países, en el caso de Argentina ocurrió en 2003.

En 2011, el entonces jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, compró de España 36 vagones que se encontraban fuera de servicio en el Metro de Madrid. Recién en el año 2018, funcionarios de la Ciudad informaron que las formaciones contenían asbesto. La línea de subte más afectada es la B, pero la Secretaria de Salud Laboral del gremio denuncia que el material nocivo se encuentra en la mayoría de la flota y en la infraestructura.

Desde la adquisición de estás formaciones, murieron tres trabajadores de cáncer y 85 tienen problemas de salud derivados por el asbesto. Por este motivo, desde el sindicato Asociación Gremial de Trabajadores del Subterráneo y Premetro (Agtsyp) realizan hace meses medidas de fuerza en las que exigen la desabestización integral del subte, el cambio de las flotas contaminadas y la reducción de la jornada laboral de 35 a 30 horas para reducir la exposición.

Además, existe un fallo judicial del año 2020 que no fue acatado. La Cámara en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad obligó al Gobierno de la Ciudad y a la empresa concesionaria a eliminar el asbesto y poner bajo vigilancia médica a todo el personal. Aún los trabajadores están a la espera de que se haga efectiva mientras siguen enfermando.