El 26 de julio del 2017, en una estación de servicio de La Plata, fue vista por última vez Johana Ramallo, de tan sólo 23 años y una hija de 6. Aquel día su madre, su familia y amigxs iniciaron una lucha agónica para encontrarla. "Mi vida se paralizó ese 26 de julio, cuando no dejaron que Johana regrese a casa", relató Marta, su madre, en una entrevista a Crónica. Todas las pruebas indican que fue secuestrada por una red de trata.

Luego de casi dos años de marchas, manifestaciones y pedidos de justicia sin respuestas, el 30 de abril de 2019 le informaron a su madre que habían hallado los restos de su hija en la zona de Palo Blanco, la Berisso. La joven había sido descuartizada y, según las pericias, su asesinato habría sido entre septiembre del 2017 y enero del 2018. El pasado 19 diciembre, Marta pudo recuperar sus restos y velarla en la sede de la Comisión Provincial por la Memoria, donde se exhibieron carteles y fotos de Johana.

Fuente: Infobae

La familia de Johana estuvo acompañada por organizaciones sociales, políticas, estudiantiles y feministas, pero no así por el Estado o la Justicia que, en tres años, no hallaron a ningún culpable del hecho. “Sólo le pedí al juez que encuentre a cada uno de los responsables del femicidio de Johana. Mi hija no merecía que la secuestre una red de trata, que le saquen sus sueños y sus metas. No merecía que la descuarticen y la mutilen al lado de un arroyo. Así que a todos los jueces y fiscales les repito: nuestras pibas no se van, a nuestras pibas las desaparecen, manifestó Marta, en una conferencia de prensa realizada en mayo del 2019.

"A tres años, la causa avanza con pasos lentos y eso lleva a la impunidad y al silencio de quienes no han podido hablar y decir qué pasó, quiénes fueron y por qué se ensañaron con la vida de nuestra Johana", denunció Marta. Mientras el Estado y los jueces continúen haciendo oídos sordos y actúen en complicidad con las redes de trata que se llevan y asesinan a cientos de pibas, el crimen de Johana continuará impune. Serán su familia y amigxs junto con organizaciones sociales y feministas quienes mantengan viva la lucha y el pedido de justicia.

Foto: Perycia