Fin de las moratorias previsionales y jubilaciones de miseria: solo cierra con represión

Por Ailín Colombo

La protesta de los miércoles de los jubilados, con apoyo de las hinchadas de fútbol, sufrió ayer una brutal represión policial y de las fuerzas federales. El saldo fue de más de 100 detenidos – que ya fueron liberados – y decenas de heridos, entre ellos, el fotógrafo Pablo Grillo, que se encuentra internado en estado grave. 

Los manifestantes reclamaron mejoras en los haberes jubilatorios y el cese del ajuste contra el sector que perpetra el gobierno de Javier Milei. Además, la convocatoria tuvo el fin de solidarizarse con los jubilados y jubiladas que venían sufriendo represión policial durante las marchas que realizan todos los miércoles desde hace por lo menos tres semanas.

Seis de cada diez personas no podrá jubilarse

A los ingresos de hambre que cobran los jubilados, se les suma el vencimiento de las moratorias previsionales el próximo 23 de marzo. El gobierno anunció, mediante el entonces titular de Anses Mariano de los Heros, que no renovarán la moratoria. Asimismo, en enero pasado, el presidente Javier Milei expuso que le parece “una atrocidad” que haya personas que se jubilen por moratorias, durante una entrevista con Radio Mitre.

Con el fin de las moratorias, solo el 40% de las personas con edad de jubilarse podrán hacerlo este año, según datos  de la Subsecretaría de Seguridad Social. Hay que tener en cuenta que en el 2023 más del 85% de las jubilaciones se realizaron a través de moratorias, de acuerdo a la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP).

Las moratorias previsionales nacieron en respuesta a la precarización laboral, cada vez mayor en el país, que cuenta con un 36% de empleo no registrado, según un informe de la UBA del 2024. 

La Ley de Plan de Pago de Deuda Previsional, conocida como moratoria, fue sancionada en 2023 y brinda la posibilidad de acceder a la jubilación a personas que cumplen con la edad pero no con los años de aporte, por lo que realizan un plan de pago para saldar la deuda.

Jubilaciones de miseria

Los haberes jubilatorios no alcanzan para vivir. La jubilación mínima es de $349 mil, incluyendo el bono de $70 mil congelado hace un año. Mientras que PUAM llegó a poco más de $293 mil con el bono.

Sin embargo, lo que no para de crecer es el costo de vida de los jubilados. La Canasta Básica del Adulto Mayor ascendió a $1.200.000, según la Defensoría de la Tercera Edad. Por lo tanto, la jubilación mínima no cubre ni el 30% de las necesidades básicas de los jubilados y jubiladas.

Represión contra la solidaridad

La jornada de ayer resultó un botón de muestra de que en el gobierno de Milei, con Patricia Bullrich a cargo de Seguridad, no hay lugar a reclamos. En respuesta al apoyo popular a los jubilados, se montó un brutal operativo. El ajuste contra los vulnerados no cierra sin represión.